Comunicado Nº 05/15
6 de Febrero de 2015
ATE le reclamó a Acler que la mejor defensa a los trabajadores del Estado es auditar los abusos que se hacen en la atención de la enfermedad
“El negocio de la enfermedad termina con la salud” decía un viejo pero actual afiche de ATE, pergeñado por Carlitos Casinelli, histórico luchador por la Salud Pública que enfrentaba el negocio de las corporaciones. ATE lamentó que sea Acler quien reclame un mayor aporte patronal para el Iosper, ya que su única finalidad es financiar sus negocios y para nada le interesa la “salud” de los trabajadores estatales entrerrianos. De ser así, estarían combatiendo el uso excesivo de la aparatología y las sobrefacturaciones en la que históricamente han incurrido, conducta que ubica a la Asociación lejos del cuidado de la salud de los trabajadores.
En un reciente encuentro entre la cúpula de Acler y el presidente del Iosper, se transparentaron públicamente las intenciones de ambos en trabajar “para mejorar las necesidades de las clínicas” aunque aclararon “pero deben tener en claro que Iosper sólo comprometerá los recursos que tiene; más de eso no”. Allí, el titular de la entidad que nuclea a los sanatorios entrerrianos, Víctor Lozze, reclamó al gobierno que aumente el aporte a la obra social provincial.
Desde ATE decimos que el directorio del Iosper, que es la representación de los trabajadores en la obra social, debe preocuparse en las necesidades de sus afiliados, no de sus prestadores.
Desde ATE hemos exigido históricamente un mayor aporte patronal, que se equipare con los aportes de las demás obras sociales. Incluso, con una actitud discriminatoria, en la provincia a otras obras sociales del Estado se le aporta mayor porcentaje (6%), con el agravante que a los jubilados solo les aporta el 2%, cuando es la franja etaria que mayor tasa de uso hace de la obra social.
Estos mayores recursos deben ser volcados a la salud de los trabajadores, no al financiamiento de las corporaciones prestadoras, que solo hacen mal uso de la aparatología con sobreprestaciones, que sólo persiguen financiar sus negocios.
Enmarcando una necesidad de la obra social, Lozze reclama un mayor aporte planteando que “el tema de fondo que hay que resolver a la brevedad, es el aporte que el gobierno hace a la obra provincial, que es el menor de todas las obras sociales provinciales del país: está recibiendo el 6,39 por ciento, cuando por ley, debería ser el nueve. Si Iosper recibiera ese nueve por ciento, la situación de manejo de los fondos sería completamente diferente”.
Lo que no dice es para quién, si para sus socios de Acler o para los afiliados al Iosper, “los trabajadores. Porque los intereses, está visto, son totalmente contrapuestos.
6 de Febrero de 2015ATE le reclamó a Acler que la mejor defensa a los trabajadores del Estado es auditar los abusos que se hacen en la atención de la enfermedad
“El negocio de la enfermedad termina con la salud” decía un viejo pero actual afiche de ATE, pergeñado por Carlitos Casinelli, histórico luchador por la Salud Pública que enfrentaba el negocio de las corporaciones. ATE lamentó que sea Acler quien reclame un mayor aporte patronal para el Iosper, ya que su única finalidad es financiar sus negocios y para nada le interesa la “salud” de los trabajadores estatales entrerrianos. De ser así, estarían combatiendo el uso excesivo de la aparatología y las sobrefacturaciones en la que históricamente han incurrido, conducta que ubica a la Asociación lejos del cuidado de la salud de los trabajadores.
En un reciente encuentro entre la cúpula de Acler y el presidente del Iosper, se transparentaron públicamente las intenciones de ambos en trabajar “para mejorar las necesidades de las clínicas” aunque aclararon “pero deben tener en claro que Iosper sólo comprometerá los recursos que tiene; más de eso no”. Allí, el titular de la entidad que nuclea a los sanatorios entrerrianos, Víctor Lozze, reclamó al gobierno que aumente el aporte a la obra social provincial.
Desde ATE decimos que el directorio del Iosper, que es la representación de los trabajadores en la obra social, debe preocuparse en las necesidades de sus afiliados, no de sus prestadores.
Desde ATE hemos exigido históricamente un mayor aporte patronal, que se equipare con los aportes de las demás obras sociales. Incluso, con una actitud discriminatoria, en la provincia a otras obras sociales del Estado se le aporta mayor porcentaje (6%), con el agravante que a los jubilados solo les aporta el 2%, cuando es la franja etaria que mayor tasa de uso hace de la obra social.
Estos mayores recursos deben ser volcados a la salud de los trabajadores, no al financiamiento de las corporaciones prestadoras, que solo hacen mal uso de la aparatología con sobreprestaciones, que sólo persiguen financiar sus negocios.
Enmarcando una necesidad de la obra social, Lozze reclama un mayor aporte planteando que “el tema de fondo que hay que resolver a la brevedad, es el aporte que el gobierno hace a la obra provincial, que es el menor de todas las obras sociales provinciales del país: está recibiendo el 6,39 por ciento, cuando por ley, debería ser el nueve. Si Iosper recibiera ese nueve por ciento, la situación de manejo de los fondos sería completamente diferente”.
Lo que no dice es para quién, si para sus socios de Acler o para los afiliados al Iosper, “los trabajadores. Porque los intereses, está visto, son totalmente contrapuestos.
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